A raíz de la polémica suscitada con la cabalgata de reyes del barrio madrileño de Puente de Vallecas, el Centro Jurídico Tomás Moro emitió un duro comunicado en el que recordaban que “una vez más el Ayuntamiento de Madrid ha decidido matar la ilusión de los niños en el distrito madrileño más abandonado por la acción de gobierno del actual Ayuntamiento.”
Otra vez el Ayuntamiento de Madrid, presidido por Carmena, vuelve a crear la polémica en una cabalgata infantil de los Reyes Magos al convertirla en una cabalgata para el adoctrinamiento LGTBI.
El proyecto inicial del Ayuntamiento para la cabalgata de reyes del próximo 5 de enero en el distrito de Puente de Vallecas era que los tres Reyes Magos quedarán eclipsados por una nueva carroza de drag Queens haciendo de reinas magas, a las que acompañaría lo que el Ayuntamiento llama impropiamente “familias diversas” (se hace necesario recordar que la única familia diversa es la constituida por un hombre y una mujer) que bajo una gran bandera LGTBI desfilarían bajo el lema “tod@s somos las reinas de nuestras vidas”.
Desde el Centro Jurídico Tomás Moro no consideran suficiente que debido a la presión del pueblo madrileño el Ayuntamiento haya decidido cambiar su proyecto inicial y ahora garantice que no habrá drag queens en la cabalgata de Reyes, dado que según el nuevo plan las tres reinas magas irán disfrazadas de ositos de peluche.
Desde el Centro Jurídico Tomás Moro quieren recordar que una vez más el Ayuntamiento de Madrid hace dejación de sus responsabilidades municipales, ya que la única misión de un Ayuntamiento es prestar los servicios que los ciudadanos demandan, y no tratar de convertir un acto festivo y tradicional en un acto de imposición ideológica. Carmena y su equipo de gobierno vuelven a hacer uso de los fondos públicos para difundir una ideología contrario el sentir mayoritario del pueblo madrileño, no siendo estas fiestas la ocasión idónea para tratar de inculcar a la sociedad una determinada ideología social y política.
El Ayuntamiento, de forma desafortunada, trata de justificar su actitud refiriendo que con esta cabalgata se trata de visibilizar al movimiento LGTBI, sin embargo la realidad es que las cabalgatas de reyes no son actos reivindicativos, ni de visibilización, sino actos lúdicos tradicionales en los que la mayoría de los adultos colaboramos con los niños para crear una noche mágica e irrepetible en la que la ilusión es el único motivo que nos lleva a todos a participar en dichas cabalgatas.
El Ayuntamiento de Madrid con estas actuaciones trata de prostituir el sentido original y único de las cabalgatas rompiendo así el ambiente de ilusión y magia que es el que en todo momento ha de presidir estos festejos.
Desde el Centro Jurídico Tomás Moro advierten que el distrito de Puente de Vallecas no es un laboratorio para que desde las instituciones se realicen experimentos de manipulación social. El distrito Puente de Vallecas es un populoso distrito madrileño que tiene problemas mucho más importantes que la visibilización LGTBI. Desde hace años (y muy especialmente con este consistorio) Puente de Vallecas vive en el más absoluto abandono.
Los propios vallecanos hablan de mini Cañada Real para referirse a la zona de Puente de Vallecas, y ello debido a la proliferación de guetos de la droga, que traen la inseguridad ciudadana. En este sentido el Ayuntamiento de Madrid no ha tomado ninguna medida efectiva, ni social, ni policial, para evitar que los toxicómanos merodean por el barrio, hagan sus necesidades en medio de la vía, se droguen en portales a la vista de menores de edad, y generen una situación de inseguridad que provoca que muchos vecinos eviten salir a la calle cuando llega la noche.
La Junta Municipal tienen censados 33 narcopisos o narcosalas, en los que los clientes consumen drogas, sin que el Ayuntamiento haya tomado medidas efectivas para corregir esta situación.
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En Puente de Vallecas cada día se cierran más negocios tradicionales que dejan paso, con la aquiescencia del Ayuntamiento, a casas de apuestas, prostíbulos y locales de alterne que degradan el barrio dejando sin futuro a los jóvenes que de esta forman quedan atrapados en las redes de la droga, el juego y la prostitución.
Numerosos propietarios de pisos y locales que no pueden alquilar o vender por la degradación del barrio se ven en la necesidad de implantar costosas medidas de seguridad en sus propiedades, para tratar de evitar las ocupaciones de los que otrora fueron sus negocios y viviendas; son precisamente estas “okupaciones” otro problema que el Ayuntamiento de Madrid no ha querido atajar.
Con esta triste situación social en la que vive el Puente de Vallecas, desde el Centro Jurídico Tomas Moro consideran que no es mucho pedir que, en la mágica noche de Reyes, el Ayuntamiento de Madrid lleve al barrio la ilusión de una noche de felicidad en la que los niños y adultos vallecanos puedan soñar en un futuro más próspero, en lugar de llevar a los vallecanos una cabalgata reivindicativa de no se sabe que derechos Lgtbi que poco o nada interesan a un barrio trabajador y humilde más interesado en procurarse su sustento diario, y en apartar a sus hijos de las redes de prostitución y drogas, que en jugar con caprichos ideológicos de una minoría ociosa empeñada en defender los dogmas de la nada científica ideología de género.
Desde Puente de Vallecas se pide al Ayuntamiento presidido por la señora Carmen un verdadero respecto al pueblo madrileño, respetando sus tradiciones y respetando la ilusión de los niños, y en este sentido el Centro Jurídico Tomas Moro se alinea con los vallecanos para exigir un Madrid libre del totalitarismos ideológico, como el que representa el actual equipo de gobierno más interesado en imponer su ideología que en defender los derechos de los ciudadanos, y aprovecha la ocasión para pedir medidas urgentes para acabar con el problema del tráfico de drogas, de la prostitución, de las okupaciones ilegales, y de la insalubridad en el distrito de Puente de Vallecas.
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