Al menos dos civiles han muerto y otros veinte han resultado heridos graves, con las granadas lanzadas el lunes 21 de diciembre por los combatientes yihadistas anti-régimen contra las aldeas de Maharda y Sqelbyia, en la provincia de Hama. En estas dos ciudades, controladas por el ejército del gobierno, viven cristianos ortodoxos. De acuerdo con la información de fuentes locales de la Agencia curda Ara News, los bombardeos han golpeado los barrios residenciales catapultando en el pánico a la población local, que se preparaba para la celebración de las festividades navideñas.
Maharda era el pueblo natal del Patriarca greco-ortodoxo Ignacio IV de Antioquía, que murió en diciembre de 2012 a la edad de 92 años. Los pueblos atacados llevan sufriendo desde hace más de un año y medio el asedio de los grupos islamistas armados, incluyendo los grupos que hacen referencia a Jabhat al-Nusra.
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