Ha fallecido en Sevilla Domingo Fal-Conde Macías (Sevilla 1928 ), pesidente honorario y consejero nacional de la Comunión Tradicionalista Carlista. Nombrado presidente en el Congreso del Escorial de 1986, dentro de la historia del carlismo, su principal logro fue el haber impulsado una labor de reconciliación entre las distintas facciones divididas: la Unión Comunión Tradicionalista, la Unión Carlista, la Regencia de Estella, la Comunión Católico- Monárquica y la Octavista Comunión carlista.
Tercer hijo de Manuel Fal-Conde, (1894-1975) mito del carlismo español, fue memoria viva de la Historia de España. Nacido en plena Dictadura de Primo de Rivera, vivió en su infancia el advenimiento de la Segunda República y la Guerra Civil española. Fue entonces cuando se produjo la ruptura total de su padre con Franco. El motivo, entre otros, fue el Decreto de Unificación de 1937, que su padre, al igual que muchos falangistas, no aceptó por considerarlo inaceptable para el carlismo.
Domingo Fal-Conde vivió entonces con su familia durísimos episodios como la persecución y el exilio de su padre, la constante supervisión policial y arrestos domiciliarios por parte de las autoridades franquistas. Su padre se había visto abocado al exilio ante la disyuntiva de “pelotón de fusilamiento o el destierro” propuesto por Franco. Exiliado o confinado desde 1936 hasta 1945 en Portugal, Palencia y Menorca no sólo no colaboró con el régimen de Franco, sino que rechazó como el falangista Hedilla, que fue condenado a muerte tres veces, ser miembro del Consejo Nacional de Falange en 1937.
Entre otros episodios singulares, Domingo Fal- Conde, niño, estuvo presente en el inolvidable capítulo de las negociaciones de su padre con el General Dávila, Pemán y Luca de Tena para pagar el infructuoso rescate de José Antonio Primo de Rivera o cómo su progenitor sobreviviría a un intento de asesinato del que fue salvado gracias a la intervención de un capitán de la Guardia Civil.
Ocupó diversos cargos en el carlismo durante el franquismo y después. Con sus hermanos José María y Alfonso Carlos estuvo presente en los Sucesos de Montejurra apoyando la facción de Don Sixto, frente al socialismo de Don Carlos Hugo y mantuvo a lo largo de su vida una estrecha relación con Don Javier Borbón- Parma, pretendiente carlista al trono español.
Abogado en ejercicio, conferenciante y editor de publicaciones católicas y carlistas, Domingo Fal- Conde fue padre de una extensa familia, un hombre de vastísima cultura, extraordinario conversador y poseedor de un fino sentido del humor. Asímismo fue un extraordinario ejemplo del “a Dios rogando y con el mazo dando” ya que dedicó parte de su carrera de abogado a labores caritativas, ofreciendo asesoría y defensa gratuita a desheredados y marginados. Paralelamente fue un intenso promotor de la devoción y adoración al Santísimo Sacramento. En setenta años superó las 900 vigilias y llegó a Presidente Diocesano Emérito de la Adoración Nocturna Española al final de sus días.
Una de sus últimas comparecencias mediáticas fue la defensa de la figura de su padre, cuando la Ley de Memoria Histórica pretendió despojarle de su calle sevillana. Paradójicamente y por ignorancia histórica, los cargos contra él fueron “colaboración con el régimen de Franco”.
El leit motiv de su vida fue su férreo compromiso y lealtad a sus ideales,el catolicismo y el tradicionalismo: Dios, Patria, Fueros y Rey. Creencias que convirtió desde niño en pilares de su recorrido vital y mantuvo con valentía hasta su muerte.