Los resultados electorales del pasado domingo arrojan un mapa político similar al que había, con un Partido Popular todavía lejos de la mayoría absoluta y necesitado de llegar a acuerdos con las demás fuerzas parlamentarias. El PP ha incrementado sus apoyos gracias a la campaña del miedo; muchos de sus votantes reconocen que han votado a ese partido “con la nariz tapada”. No “a favor” de las políticas progres de derechas, sino más bien “en contra” de la amenaza neocomunista.
Desde la Comunión Tradicionalista se ha manifestado en reiteradas ocasiones que el sistema de partidos no vela por el bien común, sino por el interés particular de los partidos políticos, motivo por el cual esta Junta de Gobierno no tiene ninguna esperanza en que tras las últimas elecciones la partitocracia tenga voluntad de alcanzar acuerdos en beneficio de España. En este sentido es significativo el incremento de la abstención, del voto en blanco y del voto nulo.
Como ya dijimos en nota de prensa ante la convocatoria de las elecciones generales del 20D, así como en nuestra campaña de propaganda resumida en el lema “La partitocracia es un timo”, la Comunión Tradicionalista Carlista rechaza el sistema de partidos y el sufragio electoral inorgánico. Es un sistema no representativo que se basa en el engaño y en el fraude sistemático a los electores. La celebración de unas nuevas elecciones generales por la ineptitud de la clase política para alcanzar acuerdos es buena prueba de ello. Por eso los carlistas nunca pondremos nuestra esperanza en la partitocracia gubernamental sino en la sociedad, en nuestra tradición, y en las familias españolas, que siempre serán un baluarte frente a la tiranía.