La conmemoración del segundo centenario del nacimiento de Antonio Aparisi y Guijarro (1815 – 1873) ha culminado en una mesa redonda celebrada el 11 de diciembre en el Salón Sorolla del Ateneo Mercantil de Valencia.
El promotor del evento, José Monzonís Pons, socio del Ateneo y presidente del Círculo Cultural Aparisi y Guijarro de Valencia tuvo que ser sustituido como presentador y moderador por enfermedad. El responsable del área de comunicación del Círculo, José Miguel Orts, hizo sus veces. Las ponencias estuvieron a cargo deArturo Martínez García, Luis Ignacio Amorós Sebastiá y Javier Barraycoa Martínez.
En la presentación Orts, excusó la ausencia de Monzonís y agradeció al Ateneo este homenaje al jurista y político valenciano, como ya, en 1973, hizo al conmemorar el primer siglo de su muerte, con la memorable conferencia de don Vicente Pons Franco, decano del Colegio de Abogados y presidente de la Academia Valenciana de Jurisprudencia. Recordó la anécdota de la gamberrada “antifascista” de ensuciar la placa de la calle Aparisi y Guijarro, del casco antiguo de Valencia y su posterior limpieza por los servicios municipales. Y la sustitución del nombre del tribuno valenciano de una calle de Aldaya por el primer alcalde socialista por el de Pablo Iglesias, fundador del PSOE y la UGT, por acusar a Aparisi –fallecido en 1873- de personaje del franquismo.
Arturo Martínez García, doctor en Derecho, abogado y profesor de Derecho Administrativo de la Universidad Politécnica de Valencia, expuso los datos principales de la biografía del homenajeado y su contexto histórico, así como su perfil profesional como prestigioso jurista de la Valencia de su tiempo y su vertiente social como “abogado de los pobres” y destacado penalista que salvó de la pena de muerte y la cárcel a numerosos marginados.
Luis Ignacio Amorós Sebastiá, médico, doctor en Historia de la Ciencia y secretario general de la Comunión Tradicionalista Carlista del Reino de Valencia, abordó las fases del acercamiento de Aparisi al Carlismo, del que terminó siendo uno de sus máximos dirigentes, como estrecho colaborador del rey legítimo en el exilio, Carlos VII. A Aparisi se debe la primera sistematización del ideario y programa político del Carlismo, que inició su andadura como pueblo en armas. La motivación principal de Aparisi fue su especial amor a la libertad, entendida desde una óptica cristiana, frente a la demagogia revolucionaria, y su sentido del papel de la tradición en la conformación del carácter de los pueblos.
Javier Barraycoa Martínez, sociólogo, doctor en Filosofía, profesor universitario y escritor, se encargó de exponer la proyección del ejemplo vital y el pensamiento de Aparisi y Guijarro en el siglo XXI. Aparisi tenía verdaderas intuiciones proféticas en una época de tempestades revolucionarias. Una nación no se sostiene en la letra cambiante de una constitución, sino por las constantes de sus creencias y costumbres, siendo fiel a sí misma.
El presentador invitó al profesor Barraycoa a compartir con el numeroso y selecto público algunas de sus vivencias como luchador por la hispanidad de Cataluña, a la que ha dedicado su energía y su talento, a través de sus libros y de su compromiso con iniciativas cívicas como Somatemps y Societat Civil Catalana.
Un animado coloquio se prolongó hasta la hora de cierre del local. El público premió con entusiastas aplausos a los ponentes y su acierto al honrar la memoria de don Antonio Aparisi y Guijarro.