La GLSE firmó recientemente un contrato de arras para la adquisición de una nueva sede en Madrid.
La Gran Logia Simbólica Española ha anunciado que iniciará en breve las obras para la adecuación del nuevo espacio (más de 300 metros cuadrados en la zona norte de la ciudad), siendo su intención iniciar el próximo curso 201-2020 en el nuevo emplazamiento.
En un comunicado la GLSE anuncian que su objetivo es normalizar la visión de la Masonería en España, pretendiendo que la nueva sede sea un centro de referencia para la Masonería liberal en Madrid.
Según manifiestan «ahora más que nunca se hace necesario crear espacios de reflexión y de pensamiento crítico, ante el avance de la intolerancia tanto en Europa como en nuestro país», evidentemente en su comunicado la masonería no recuerda que precisamente los dogmas masónicos han sido los padres de la intolerancia religiosa y política que ha sufrido occidente desde la Revolución Francesa.