En un comunicado hecho publico por la Gran Logia Nacional Francesa los masones han recordado que aunque «se mantienen al margen del debate político o religioso» sin embargo han decidido sumarse «a la reacción popular contra el antisemitismo que está movilizando en las principales ciudades francesas a miles de personas para decir basta al crecimiento de las expresiones de odio hacia la población judía»
La Masonería Francesa recuerda la excepcionalidad de este tipo de pronunciamientos, para no “afectar la plena libertad de conciencia de sus miembros”. Sin embargo, “en las circunstancias actuales” que atraviesa la República Francesa, la Gran Logia Nacional Francesa considera considera obligado “dejar muy claro que el ideal de fraternidad” que caracteriza a la Masonería “está en total contradicción con el antisemismo en todas sus formas”, el “odio racial o cualquier otra forma de racismo”.
Sin embargo nunca hemos escuchado a la masonería, ni francesa, ni de ninguna parte, alzar su voz cuando los perseguidos han sido los cristianos. En este sentido, y tal y como informábamos hace unos días, la creencia religiosa más perseguida en Francia es la cristiana.
Creeremos a los masones cuando les escuchemos defender los derechos de todas la religiones, y cuando les escuchemos pedir perdón por la persecuciones religiosas que ellos protagonizaron durante la nefasta Revolución Francesa.
Francia: indignación selectiva ante los actos anticristianos