Al entrar en su décimo año de vida, el Museo del Carlismo de Estella romperá la que ha sido una tónica habitual desde su apertura, como es la limitación de las exposiciones temporales de cada año a un periodo de muestra de nueve meses. La actual, que bajo el título Rendir la plaza. El bloqueo carlista de Pamplona, (septiembre de 1874-febrero de 1875) lleva abierta desde el pasado mes de abril no ha concluido con el puente de diciembre como es costumbre, sino que se quedará en el Palacio del Gobernador hasta el 3 de abril.
La exposición, que a través del caso carlista ha pretendido acercar a los visitantes a la táctica bélica de los asedios y sus implicaciones para la vida social ha recibido hasta ahora unas 5.000 visitas, una cifra que con ser satisfactoria no es la causa única de la prórroga de la exposición. Muchas veces la limitación temporal procede del periodo de préstamo de las piezas estrella, una de las cuales era en este caso el cuaderno del bloqueo carlista, de los hermanos Aniceto y Nemesio Lagarde, que debió devolverse al Archivo General de Navarra en noviembre por imperativos de conservación.
Quedan no obstante, objetos importantes, procedentes del Museo Numantino de Soria y del Museo de Zaragoza, piezas de artillería romana (siglos II a.C.) en el primer caso o un grabado de Goya, un óleo De David Wilkie y una primera serie de los Episodios Nacionales de Galdós en el segundo. Además, hay préstamos del Museo Etnológico de Navarra, del Palacio de Navarra, Archivo Municipal de Pamplona, de la Biblioteca Navarra, del Colegio Notarial de Navarra, del Nuevo Casino de Pamplona, y del propio museo anfitrión, así como de colecciones particulares.
“La posibilidad de disponer de estos materiales hasta principios de abril es la que nos ha abierto la puerta a ampliar el calendario habitual de la exposición, no era algo meditado, simplemente ha surgido así”, explica Iñaki Urricelqui Pacho, técnico de museos responsable de la instalación.