El pasado 8 de agosto el Alto Representante en nombre de la UE vomitó un comunicado en el segundo aniversario de las elecciones presidenciales de Bielorrusia en la que tachaba dichas elecciones de fraudulentas.

Antes de realizar unas breves valoraciones, pasamos a reproducir íntegramente el comunicado: 

Declaraciones de la Unión Europea

Este martes se cumple el segundo aniversario de las elecciones presidenciales fraudulentas del 9 de agosto de 2020 que han despojado a los bielorrusos de la oportunidad de elegir libremente su propio futuro. En este día, reiteramos nuestro firme apoyo a sus aspiraciones democráticas y esfuerzos para defender el respeto de los derechos humanos fundamentales. Reiteramos que Aleksandr Lukashenko carece de toda legitimidad democrática.

Hace dos años, el régimen de Minsk lanzó una represión masiva contra el pueblo de Bielorrusia por buscar pacíficamente un gobierno democrático. Desde entonces, el régimen ha orquestado una brutal represión que se ha agravado continuamente. Los presos políticos – defensores de los derechos humanos, periodistas, sindicalistas, trabajadores de los medios de comunicación, abogados y ciudadanos comunes que expresan cualquier crítica al sistema – ahora superan los 1200 y esta cifra crece día a día. Muchos bielorrusos, incluidos representantes de la oposición democrática, se vieron obligados a abandonar el país para evitar una persecución injustificada. El régimen ha calificado a muchos activistas de la democracia como “terroristas”, acosándolos con desinformación e intimidación, además de amenazarlos con la pena de muerte. También ha intensificado su persecución contra la comunidad polaca.

En cambio, ninguno de los autores de actos de violencia contra la población civil ha rendido cuentas. Continuaremos apoyando los esfuerzos internacionales de rendición de cuentas para Bielorrusia, con miras a recopilar y preservar evidencia de violaciones de derechos humanos. No olvidaremos a las víctimas del régimen de Lukashenko y sus crímenes pasados ​​y presentes.

En febrero de este año, cuando Rusia lanzó su guerra de agresión no provocada e injustificada contra Ucrania, el régimen de Lukashenko se convirtió en cómplice, en contra de la voluntad de la gran mayoría del pueblo bielorruso, al permitir que Rusia usara el territorio bielorruso para invadir Ucrania, como una plataforma de lanzamiento de sus misiles y otorgando a Moscú pleno apoyo político y logístico. El régimen ahora también persigue a los bielorrusos por oponerse a la guerra.   

Junto con nuestros socios de ideas afines, hemos impuesto sanciones en respuesta a la represión en curso, las infracciones del derecho internacional y las normas de aviación, como también lo confirmó el Consejo de la OACI, la instrumentalización de la migración y la complicidad de Lukashenko en la guerra de Rusia contra Ucrania.

Pedimos a las autoridades de Bielorrusia que se adhieran plenamente a los principios de la democracia y el estado de derecho, respeten los derechos humanos y las libertades fundamentales y actúen de conformidad con el derecho internacional y los propios compromisos de Bielorrusia, incluso dejando de colaborar con Rusia en la guerra de agresión contra Ucrania. Pedimos la liberación inmediata e incondicional y la rehabilitación de todos los presos políticos y el cese de la represión. Las autoridades de Bielorrusia deben entablar un diálogo genuino e inclusivo con todos los elementos de la sociedad, que conduzca a elecciones libres y justas bajo la observación internacional y de conformidad con las normas internacionales.

Nuestra determinación de apoyar al pueblo de Bielorrusia permanece invariable. Desde agosto de 2020, la UE ha comprometido alrededor de 65 millones EUR en apoyo al pueblo de Bielorrusia: las víctimas de la represión, la sociedad civil, los medios de comunicación independientes, las mujeres, los jóvenes y los estudiantes, las pequeñas empresas, la salud y la cultura. Estamos listos para movilizar nuestro plan integral de apoyo económico de 3 000 millones de euros una vez que haya tenido lugar una transición democrática en Bielorrusia. Esto muestra claramente nuestro compromiso a largo plazo con la paz, las aspiraciones democráticas y la prosperidad del pueblo bielorruso.

Para la Unión Europea, Bielorrusia y su valiente pueblo son un importante vecino europeo. Estamos firmemente comprometidos a continuar utilizando nuestros instrumentos disponibles, incluidas más sanciones y un mayor apoyo, para apoyar los derechos democráticos del pueblo bielorruso. Continuaremos apoyando al pueblo de Bielorrusia y apoyando una Bielorrusia democrática, independiente, soberana, próspera y estable.

Valoraciones del comunicado

La Unión Europea continuamente habla de desinformación, pero en pocas ocasiones reconoce que sus autoridades, organismos y comisiones son fuente de desinformación constante.

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No es necesario entrar a valorar si la «democracia» entendida al modo liberal es una buena forma de gobierno para desenmascarar el doble rasero de la Unión Europea. Acusan a Lukashenko de ganar unas elecciones fraudulentas, y callan con respecto a Volodímir Zelenski y la manipulación del pueblo ucraniano. Si Bielorrusia es un títere en manos de Rusia, Ucrania lo es igualmente, pero en manos de USA. Criticar al gobierno de Bielorrusia, y no criticar al corrupto gobierno de Ucrania, supone reconocer que a Europa le importa una higa la democracia, pues lo único que le preocupa realmente es no poder cumplir con los mandatos impuestos por su patrón americano.

La Unión Europea se muestra valiente al denunciar la falta de democracia en Bielorrusia, pero no hemos visto esa valentía para denunciar dictaduras como la China, o para denunciar la falta de transparencia, por no decir otro cosa, en las últimas elecciones americanas que dieron un triunfo más que discutible a Biden.

Se amenaza con nuevas sanciones a Bielorrusia, a la que se acusa de infringir el derecho internacional y las normas de aviación, pero ¿Estados Unidos ha respetado la soberanía nacional, el derecho a un juicio justo, y las normas de aviación al matar Ayman al Zawahiri? ¿El ataque mediante un dron no supuso la violación de la soberanía de Afganistán, la violación de su espacio aéreo, y la conculcación del principio de un juicio justo?

Europa vive instalada en la hipocresía y en la desinformación, y no desaprovecha la ocasión para colar inadvertidamente su ideología. En el comunicado se habla de nuevas sanciones, sin reconocer que las mismas están perjudicando principalmente a los europeos, y sin considerar que dichas sanciones no se han sometido al refrendo popular, ni se han sometido a la crítica del pueblo. Igualmente, el comunicado habla de un «diálogo genuino e inclusivo con todos los elementos de la sociedad» cuando todos somos conocedores que la burocracia europea, y los propios gobiernos nacionales, nunca entablan diálogo con todos aquellos que manifiestan sus discrepancias con la coyunda liberal-socialista. Todos los europeos hemos experimentado en nuestras carnes la imposición totalitaria de ideologías ajenas a nuestra historia y tradición sin que se nos haya permitido la más mínima crítica.Que no se engañe nadie: Europa es incapaz de garantizar la soberanía de ninguna nación, pues ella misma ya no posee soberanía, pues ni es capaz de defender su propio territorio sin la ayuda americana, ni es capaz de garantizar su independencia energética, ni es capaz de garantizar su soberanía alimentaria.

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