Slovakia, national parliament election:
Seats
OĽaNO-EPP: 53 (+34)
Smer-S&D: 38 (-11)
SR-ID: 17 (+6)
ĽSNS-NI: 17 (+3)
SaS-ECR: 13 (-8)
ZĽ-EPP: 12 (new)
KDH-EPP: 0
PS/S-RE|EPP: 0 (new)Majority: 76#Volby #NRSR2020 #Slovakia
— Europe Elects (@EuropeElects) March 1, 2020
Este sábado día 29 de febrero, el Grupo del Visegrado ha sido escenario de comicios electorales legislativos. En este caso, le ha tocado a los eslovacos, tras una campaña marcada por la cuestión de la corrupción de los socialdemócratas de Fico.
Para conocer más detalles sobre el panorama post-electoral y meramente político de este país moderadamente católico, hemos querido hacer consultas al responsable de eventos y comunicación en Unión Editorial y en el Instituto Juan de Mariana, Pablo Sánchez Somana, un venezolano afincado en España que conoce bastante a fondo la política eslovaca.
A continuación, pueden leer el contenido de la entrevista.
¿Qué ha llevado a la formación política Eslovaquia Progresista, vinculada a la actual presidenta Zuzana Kaputova, a no conseguir un resultado nada considerable?
Tras la elección de Matúš Vallo como Alcalde de Bratislava, de Zuzana Čaputová en la presidencia de la República y el auge de los liberal-demócratas en el PE se pensó que sería su partido el que lideraría la revuelta electoral contra el gobierno. De hecho estuvieron liderando la intención de voto un tiempo. Pero cuando tienes tanta competencia no puedes dormirte en los laureles. PS-Spolu se confió en el soporte que daba ser el partido de la presidenta sin entender que la dinámica de una elección presidencial es distinta a la de unas parlamentarias. No crearon una estructura de partido que pudiera movilizar los potenciales apoyos, ni aprovecharon su momentum para venderse como los líderes de un muy probable gobierno de cambio. A los errores propios de la coalición sumaria un hecho repetitivo en el sistema político eslovaco y checho: la gente no vota para presidente al partido de gobierno (y viceversa).
¿Por qué el socialdemócrata Robert Fico y su sucesor temporal mantenían una política migratoria contraria al establishment eurocrático?
Esto es muy interesante. SMER como heredero no-declarado del antiguo partido comunista, su electorado fuerte es el eslovaco que se encuentra fuera de las urbes, que no ha disfrutado de igual manera los avances económicos y que es más conservador. Los valores tradicionales, la manutención del Estado de Bienestar y la permanencia de la identidad eslovaca es un tema importante. SMER ha entendido la preocupación de los eslovacos que puedan ver un riesgo en la llegada masiva de inmigrantes, especialmente los provenientes del mundo musulmán. En definitiva, el panorama ideológico de los partidos eslovacos no es como en otros países. La izquierda eslovaca pactaría primero con partidos de derecha dura antes que con los centristas de Progresívne Slovensko.
El asesinato del periodista Jan Kuciak dio la voz de alarma sobre la corrupción política en el Estado eslovaco. ¿Podrías hacer una breve descripción sobre la misma?
La corrupción en el gobierno de Fico no era un secreto. Podemos recordar el desvío de fondos europeos a través del Ministerio de Educación, controlado en aquel entonces por el Partido Nacional Eslovaco (SNS) o el uso mafioso de los recursos europeos para la agricultura. El asesinato Jan y su novia, Martina Kusnirova, marca un antes y un después en el panorama político eslovaco. Se suele decir que mientras las cosas vayan bien la corrupción no importa y en cierta manera la economía eslovaca ha tenido un buen desenvolvimiento. Pero una cosa es desviar recursos europeos y otra hacerse la vista gorda ante posibles relaciones entre empresarios y la mafia italiana. ¡y mucho más si es asesinado un periodista joven por hacer su trabajo! La sociedad eslovaca tiene aún presente la era Comunista y los años del autoritarismo de Vladimír Mečiar. No tolerarían la censura de la prensa, bien sea el gobierno o un empresario cercano al gobierno.
¿Qué se atrevería a prever sobre las negociaciones para la formación de gobierno en Eslovaquia?
Lo lógico es que haya un gobierno de centro-derecha líderado por Igor Matovič. El mayor reto, creo yo, será poner de acuerdo a los distintos partidos y egos. SAS seguramente querrá la presidencia del parlamento o la cartera de economía, pero los resultados no les han dejado en buenas condiciones para exigir, además la sociedad sigue asociando al líder del partido, Richard Sulík, con la caída del gobierno de Iveta Radičová. Matovič podría aprovecharse de esto. Respecto a las políticas del gobierno, no veo grandes divergencias. Cosa distinta si hubiera entrado el partido de Eslovaquia Progresista en el parlamento.
¿Por qué ningún partido del ECR ha mejorado sus resultados electorales, habiéndolo hecho uno del Partido Popular Europeo (si consideramos «las derechas»)? ¿Podrías hablarnos de Sloboda a Solidarita?
SAS y OĽaNO comparten el electorado de base, de hecho en las elecciones de 2010 fueron juntos a las elecciones. El éxito de uno va ligado a la caída del otro. Ahora bien, ¿por qué ha mejorado OĽaNO en vez de SAS? Matovič es un hombre controversial, si alguien sabe tocar temas calientes o poner sobre la mesa un tema es él. He de destacar que empezó su carrera política siendo el ultimo del cartel (en listas abiertas) y fue electo por los votos individuales que logró con sus campañas anti-corrupción y no por ser el ¨favorito del partido¨. Facilitando así una imagen como alguien ¨ordinario¨ y sin miedo a denunciar la corrupción. Justo la razón de ser del movimiento: ¡Por una Eslovaquia decente!
Es una pena que SAS no haya podido aprovechar el momento y ser ellos quienes lideren el cambio. Sulík, padre del breve flax tax eslovaco, ha sido acusado muchas veces tener un tinte autoritario en su manejo del partido. Mucha gente que antes estaba cerca de SAS se ha ido a otros movimientos, como Martin Poliačik (ahora en PS-Spolu) o el mismo Matovič. Le va a ser difícil quitarse esa imagen de intransigente. También los vaivenes le han pasado factura. Recordemos que SAS empezó siendo un partido de ALDE, y que en la campaña del referéndum Por la familia tradicional hicieron campaña por el no. En los últimos años han ido girando a posiciones más conservadoras sin ser claras del todo. Dejando espacio a su izquierda para que surja un partido como PS y a la vez siendo incapaces de llamar al voto conservador.
¿Será determinante el «estímulo conservador» de los últimos meses (mayor oposición al aborto, protestas contra la Convención de Estambul…) a nivel político?
Es probable. Todos los partidos de la posible coalición tienen en común el ser «anti-corrupción», bien, pero si quieren crecer o establecerse tendrán que diferenciarse de las otras opciones. Es allí donde entrarán estás discusiones. Sobretodo tomando en cuenta el auge del partido Somos Familia (Sme Rodina) y el ĽSNS de Kotleba. La inmigración será un tema a tratar durante esta legislatura. Lo que no sé es si vayan a estar de acuerdo, pueda terminar destruyendo la coalición, como en el pasado fue el préstamo a Grecia.
¿Por qué, en Eslovaquia, el «bloque de derechas» no ha tenido tanta relevancia como en Hungría y en Polonia, en legislaturas anteriores?
Cómo comentaba al principio, el panorama político en Eslovaquia es complicado. Hay partidos de derechas que pactarían antes con la izquierda que con la otra derecha. La centro-derecha de OĽaNO, SAS y Za Ludí es más liberal urbanita. Y la otra derecha (Sme Rodina, ĽSNS) es más proclive a un estado de bienestar más presente y con un mayor control de las fronteras. Entonces tendrían más posibilidades de entrar en un gobierno de los socialdemócratas de Smer-SD que en un hipotético gobierno de centro-derecha. Voy a tratar de explicarlo así: es cómo si PP y Cs le impusieran un cordón sanitario a VOX (no habrá pactos bajo ninguna condición), y el PSOE, necesitando los votos de VOX, le ofreciese una coalición. Pues eso.