El historiador económico Adam Tooze escribe en un ensayo en el semanario “Die Zeit” sobre un fenómeno que describe como una “policrisis” en relación con Edgar Morin. Europa y el resto del mundo no se enfrentan a una única crisis, sino a toda una serie de crisis convergentes que se refuerzan mutuamente . Estos podrían sobrecargar las capacidades existentes de gestión de crisis.

Una policrisis se puede “definir como una situación en la que el todo es más peligroso que la suma de sus partes” porque las interacciones entre las crisis individuales llevaron a que la situación general se deteriorara significativamente. Por ejemplo, una posible recesión mundial podría poner en peligro la estabilidad política de EE. UU., lo que a su vez ejercería presión sobre la zona monetaria europea y tendría un impacto negativo en el problema alimentario de los países en desarrollo.

Estas interacciones son “complejas y difíciles de evaluar”. Sin embargo, es probable que “tiendan a escalar en lugar de desescalar”. Esto “no es una profecía de fatalidad, sino una descripción de la dimensión del problema”. Lo único cierto es que “la historia no ha terminado, sino que sus movimientos van aumentando en velocidad e intensidad”.¹

Periodistas del “Handelsblatt” escribieron recientemente en un análisis detallado de la situación económica actual que se estaba gestando una “tormenta perfecta” que podría afectar al mundo entero.

Gunther Rohmoserya había advertido del fenómeno descrito por Tooze en 1994 y describió una serie de tendencias de crisis convergentes en Alemania y Europa. Estas son consecuencias directas de procesos de disolución mental y cultural o de la implementación de ideologías utópicas. La pérdida de la crecida identidad cultural europea de base cristiana podría favorecer que la respuesta a las crisis que se avecinan sea un mero populismo nacional en lugar de un conservadurismo consolidado. A medio plazo, esta evolución llegará a un punto en el que superará la resiliencia de las sociedades europeas, cada vez más débiles como resultado de la erosión de la sustancia cultural. Esto dará lugar a graves distorsiones. Alemania y Europa están lidiando con “desarrollos catastróficos”.²

Este artículo se publicó originalmente en alemán en https://renovatio.org/

Fuentes

1. Adam Tooze: “¡Kawumm!”, Die Zeit , 14 de julio de 2022, p. 2.
2. Günter Rohrmoser: La emergencia. La crisis de nuestra república liberal , Stuttgart 1994.

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